jueves, 14 de octubre de 2010

La historia de Kon-El (Superboy) (Comic)

El comic La Muerte de Superman, supuso un gran acierto, y se vendió como rosquillas. Desde aquel entonces, el personaje de Kon-El siempre ha tenido una obsesión: demostrar que es digno de llevar el signo de Superman en el pecho. Y es que es muy duro ser el clon de un superhéroe, y mucho más de él, que llegado el Juicio Final, acabó con su vida. Pero para los que no han seguido todo lo que aconteció a aquel fatídico día, voy a recordar un poco la historia y como Kon-El acabó asesinando a Superman.

Superboy no tenía identidad secreta y vivía única y exclusivamente para la acción desenfrenada y alocada que le proporcionaban las aventuras que se narraron en su propia serie entre 1993 y 2002. En cierto sentido, no le quedaba más remedio que divertirse porque, al fin y al cabo, estaba atrapado en un cuerpo de 16 años que no podía envejecer. La inmadurez era una condición que lo acompañaba de forma intrínseca y que, al principio, le vino muy bien para sus andanzas en solitario y con sus amigos de Young Justice.

Pero, a pesar de eso, le hacía falta algo, que, con el tiempo, fue consiguiendo. Para empezar, se deshizo de la tara genética que le impedía crecer, un gran paso, para posteriormente, ganarse la confianza de Superman, que incluso le dio un nombre kryptoniano, Kon-El. Ya estaba todo preparadopara que Superboy diera un paso más: formar parte de los Kent con la falsa identidad de Conner, un presunto primo de Clark.

A partir de ese momento, intentaba aclimatarse a la tranquila vida de Smallville mientras deseaba que llegara el fin de semana para demostrar de lo que era capaz con sus compañeros de aventuras. Por desgracia, le esperaba una buena sorpresa: su código genético no procedía solo de Superman, sino también de Lex Luthor. En el momento en que descubrió semejante secreto, Superboy vivió con el alma en vilo, ya que temía que la herencia malvada Luthor se apoderase de él en cualquier momento. Y en efecto, así fue, pero pronto tuvo ocasión de redimirse, muriendo de una forma heroica, para ser revivido poco después.

Este Superboy resucitado es el que acabó asesinando a Superman, y ahora debe recuperar el tiempo perdido y, además, plantearse qué hacer para estar a la altura de su mentor.

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